Definitivamente Sheratan es una mala estrella. Elevar eleva, eso sí, pero a cambio tiene una naturaleza de Marte, Saturno y Urano que se puede considerar maléfica y dañina, en especial cuando se coloca en el mismo grado de un planeta personal.
Un caso ilustrativo e interesante es el de Gianni Angelli, el nieto del fundador de la empresa automovilística italiana Fiat. Sin duda fue una persona encumbrado, elevado y llegó a lo más alto que se puede llegar en el mundo empresarial.
Angelli tenía a la estrella Sheratan en el mismo grado del planeta Venus.
Definitivamente la estrella Sheratan tiene un componente maléfico que la hace una ”mala estrella”, y el planeta Venus, en los hombres, tiene una relación directa con la próstata.
Cuando el atacir del Ascendente, en el ciclo de 96 años, el reloj de las muertes personales, llegó a la oposición con Venus y la estrella Sheratán, Angellí, murió víctima de una raro tumor canceroso en la próstata, dejándose notar una vez más la nefasta influencia de la estrella Sheratan.