Pronto llegará el eclipse de Sol más espectacular e importante del siglo XXI y su influencia la percibiremos doblemente; en forma de alteraciones climatológicas de enorme envergadura y en forma de movimientos y transformaciones sociales extraordinarias.

El eclipse de Sol marcará un antes y un después de manera semejante al eclipse de 1999 que fue pronosticado por Nostradamus. Y que enlaza con el 11 S y con todo lo que ha cambiado el mundo a causa de ello.

Este eclipse de octubre de 2023, esta descrito en la página final de Códice de Dresde, donde se reflejan alteraciones meteorológicas con trastornos enormes causados por las inundaciones, torrentes y desbordamientos de aguas.

No es que el día 14 de octubre se abra el cielo en canal y se forme un tsunami mundial.  Nada de eso, no hay que ser exagerado. Lo que se puede esperar es que entramos en una etapa crítica del evidente cambio climático que estamos experimentando.

Le contaba a mi sobrino Eduardo, que me imagino a la Tierra como un muñeco Michelín, con sus tubos circulares en lugar de neumáticos, tubos de aire que circulan alrededor de la tierra paralelos a Ecuador, y que se han pinchado, como se pincha el neumático de una rueda, y han dejado de circular con orden, y ahora el tubo de aire tórrido del Sahara, el que se lleva el polvo hasta Brasil y provoca los vientos alisios, se ha “pinchado” y va dando bandazos. Y el otro tubo que nos trae los aires de Azores a Europa, también ha pinchado, y el tubo que gira alrededor del polo, también ha pinchado, por eso va rebufando el tiempo con muchas olas de calor y de frio.  Hemos perdido el otoño y la primavera.

Y qué tiene que ver el eclipse con esto.  –Mucho, más de lo que te puedes imaginar, siento no poderte explicar sino a señora que se cansa se me va escapar.  Vamos al grano, que es lo que ella le gusta.

Voy a calcular el recorrido de la sombra del eclipse del 14 de octubre de 2023, sobre la superficie del globo terrestre.

Fíjate qué barbaridad de eclipse, su sombra deja en noche oscura a millones personas: desde Seattle en el estado de Washington hasta Houston en Tejas, territorio mexicano anexionado por USA. Luego se hará de noche en Campeche y en buena parte del Yucatán.  En Tikal en Guatemala, Honduras, Costa Rica y Panamá también anochecerá. Después Colombia, tanto Medellín como Bogotá notarán a extraña sensación que provoca el eclipse al oscurecer el cielo en pleno día. Como una sombra oscura que todo lo cubre de tiniebla.  Un susto, que si no fuera porque está avisado, podría provocar pánico en la población. Y la sombra saldrá por Brasil oscureciendo totalmente a la ciudad de Natal y las zonas señalas por el gráfico

La penumbra, que también está señalada en este gráfico, abarca todo EEUU, parte del Canadá, toda centro América, y buena parte de América del Sur, incluyendo a Buenos Aires y a Santiago de Chile. -A la Patagonia no llega.

-Muy bien, ¿Y ahora qué?

Hasta aquí llega la información que nos pueden a dar nuestros hermanos cainitas los astrónomos y meteorólogos, no saben más. Tendrán gráficos mucho más bonitos eso sí, pero nada más.

Además de la cosa bonita de que se hace de noche aquí o allá, la influencia de los eclipses se dejan notar de modo especial. Por un lado en forma de alteraciones climatológicas de enorme envergadura y por otro lado en forma de alteraciones sociales extraordinarias.

Ya lo he dicho antes, la influencia del eclipse de Sol se deja notar a lo largo de tantos años como horas dura el eclipse, desde que comienza a oscurecer en el Pacífico norte, hasta que termina su sombra en el Atlántico sur. Este es el eclipse más largo que he conocido y de los que hay muy pocos, ya que su oscura trayectoria dura 5 horas y 51 minutos, lo que equivale a casi  6 años de influencia.

Comenzamos. -En primer lugar las alteraciones climatológicas de enorme envergadura que ocurrirán durante los próximos años,  serán extraordinarias, nunca antes vistas o muy notables. Pienso que donde más se puede notar es en centro América y en el antiguo territorio maya, sin descartar todas las zonas que están en su penumbra, que incluye a Miami y New York y alcanza hasta el cono sur.  Seis años de alteraciones meteorológicas y climáticas nunca antes vistas.   –Esto ya lo vienen avisando desde sectores de cierto nivel.

Este pronóstico debería de servir no para asustar a nadie, sino para alertar, advertir, prevenir y preparar a la población y a los gobiernos ante estas eventualidades de clima adverso. – Nadie me va a hacer ni puto caso, ya lo sé-

En segundo lugar la influencia de este tipo de eclipse se podrá notar a traves de intensas alteraciones sociales, modificaciones y transformaciones extraordinarias que dejarán una huella en el tiempo, y lo que ocurra en los próximos seis años dejará a toda América en unas condiciones sociales, económicas y climatológicas en las que ya nunca más serán las cosas como eran antes.

Los detalles ya nos los irán contando los medios de comunicación, que estoy seguro que la señora que se cansa ya estará agotada.

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