La verdad es que me da una pereza enorme escribir sobre las elecciones de Venezuela y más aún porque no puedo pronosticar lo que la mayor parte de mis lectores esperan, solo unos pocos adaptados al sistema se pueden alegrar de lo que escriba.

Se presentan 11 candidatos, Nicolás Maduro y 10 más, y eso es una gran ventaja de salida para el bolivariano, que será bruto e inculto, pero no es nada tonto. Y de momento sigue siendo “Juicio general” en Venezuela, que es lo mismo que decir, en lenguaje coloquial, que es el puto amo, junto con los comunistas caribeños que se han apoderado del país más rico de América del Sur, y no lo van a soltar de ninguna de las maneras.

-A ver que dicen las encuestas que mueven millones para dar sus informes.

En Venezuela, dos encuestas dan una amplia ventaja a Edmundo González con cerca del 60% de los votos

ClearPath y “Poder y Estrategia” difundieron los sondeos que realizaron en julio de cara a los comicios del próximo domingo 28. Según la primera consultora, la diferencia a favor del opositor por sobre el dictador Maduro es de más de 40 puntos; para el otro estudio, la brecha es de 28 puntos.

-Muy bien, no sé cuánto dinero se habrá invertido en estas encuestas, ni quienes han sido encuestados, ojala tengan razón, pero me temo es un puro timo.

Si la candidata fuera María Corina, seguro que no se podría ocultar su victoria, pero con Edmundo el Virgo, el pobre hombre tiene menos carisma que Feijoo que también es Virgo y tiene muy poco tirón. Edmundo tiene repartir el voto con 9 competidores, además de Maduro que está muy bien amarrado al sillón presidencial. No le veo “color” al hombre.

No se sale fácil del socialismo, y menos del venezolano que tienen dinerito para repartir. Por otro lado hay que pensar en la cantidad de venezolanos que han tenido que irse del país y no tienen derecho al voto, y eso son más de dos millones de personas.

Moral no les falta a quienes piensan sacar a Maduro y su “combo” del poder, y no quisiera que la perdieran. Las elecciones del domingo 28 de julio no me provocan alegría. Pienso que habrá que esperar unos años más antes de que los socialistas bolivarianos salgan el poder, si es salen alguna vez. Y nunca me alegraría más equivocarme.

Siempre nos quedarán los mangos que son una fruta barata y antidepresiva.