Ante la imposibilidad de realizar un estudio clínico como debería ser, si que puedo realizar estudios de interés pedagógico con la ayuda de mis lectores. Personas que pueden tener intolerancias alimenticias y les puede interesar conocer las causas astrológicas de su intolerancia y quizás el remedio o el paliativo para de ello.
Silvia S. desde Montevideo me ha ofrecido su caso. Me decía:
“Hola. Nací el 5 de febrero 1950 5 y 30. En Montevideo Uruguay barrio El cerro. Soy intolerante al gluten, lactosa y al maíz. Desde niña siempre enferma. Y hoy con 71 años sigo igual.”
Muy bien voy a calcular su carta con las Dodecatemorias y lo que conviene mostrar para analizar el tema de las intolerancias.
En la carta de cielo y las dodecatemorias de Silvia S. se observa que la Luna está junto a Saturno, en la Casa VIII en el signo de Virgo y en la dodecatemoria a de Escorpio, donde la Luna está en debilidad. De entrada la Luna es la leche y los lácteos y algo hace que no los digiera bien
La Luna con Saturno refleja un factor que retrasa la digestión, que se necesita más tiempo para digerir, para evacuar del estómago a cierto tipo de alimentos, en el caso de los lácteos puede haber mala digestión, o digesntion demasiado lenta.
Por otro lado en Virgo, que es donde se ubica la Luna de Silvia, están los cereales y Mercurio que es el regente, está en la Casa XII en Capricornio “bien recibido” formando aspecto con Saturno y la Luna, indica una alteración como puede ser la intolerancia al gluten del trigo por Mercurio, y al maíz porque Mercurio se encuentra en la dodecatemoria de Sagitario, regida por Júpiter que es el númen del maíz, y además Mercurio son todos los granos y los cereales.
En el sistema que propone Vladimir, no se valora entre aspectos buenos o malos, se valora que haya aspectos de los planetas entre sí, se conectan de un modo u otro se correlacionan. Para las alteraciones de la salud siempre hay que observar las Casas VI y la XII, Mercurio y la Luna, esos son los elementos fundamentales.
La Luna tiene relación con el estómago, el páncreas y buena parte de aparato digestivo, mientras que Mercurio son los intestinos que, en elcaso de Silvia parace ser que no absorben bien los cereales ni los lácteos. Siempre le quedará el jamón de Jabugo, las patatas a la brava, los berberechos y los mejillones, los frutos del mar, los huevos y multitud de frutas y verduras.
Si en lugar de un trígono entre Mercurio de la Casa XII y Saturno y la Luna, hubiera una oposición desde la Casa VI, la alteración de la salud hubiera sido mucho peor. En su caso, basta con abstenerse de ingerir cereales y lácteos y complementar con alimentos de las cestas de Piscis que son muy variados.