Las personas que nacen con el planeta Plutón alineado con el Sol, es decir en conjunción o cerca del Sol, suelen notar la especial influencia astrológica de este enigmático planeta, que actúa directamente sobre la personalidad, haciéndoles un poco enigmáticos y atrayentes, y además le induce  hacia la ruptura con los esquemas establecidos.

Este toque plutoniano les hace sentirse diferentes, por eso son personas que  tratan por todos los medios conseguir la autosuficiencia, no depender de nadie, pues les cuesta mucho adaptarse o aceptar la disciplina o las ideas de otros. Su sentido moral y su capacidad de organización es siempre algo anómala o tendente a lo ultralógico.

Algunas de estas personas experimentan la sensación de ser portadores de una verdad, de una razón innovadora que les lleva a ciertos comportamientos enigmáticos o a la necesidad de ocultar sus verdaderas intenciones. Su psiquismo puede ser difícil o complicado.

En el mejor de los casos, aparece en personas que son capaces de sacrificarse por una causa, aunque muchas veces se trata de su propia causa (sobre todo en la generación de Plutón en Leo).

Planeta presente es más fuerte que planeta regente, lo que significa que quienes tienen a Plutón cerquita del Sol pueden desarrollar un temperamento semejante a las personas de Escorpio quienes destacan por algún episodio de vida sexual turbulenta.  

En todos los casos sus vidas están sujetas a lecciones duras, con cierto peligro para su vida o la de parientes cercanos. A veces pasan la experiencia de la proximidad de la muerte en situaciones anómalas. (Suicidios o accidentes del marido).

Es el aspecto de los «matadores», parecido a Marte, que en algunos casos toman un cariz artístico (toreros) en otros es de tipo constructivo y en otros es simplemente un instinto destructivo por malignidad. Como curiosidad, la mayoría de ellos suelen pertenecer a grupos minoritarios de cualquier nivel o bien optar por la autarquía.

Manolete, uno de los grandes toreros de la historia de la tauromaquia, el «matador» por excelencia, tenía a Plutón muy cerca de su Sol, pero también tenía esa misma configuración Jonh Dillinguer, el famosísimo gánster norteamericano, o el mismísimo Nerón.

Pero la influencia de Plutón también puede aflorar por la vida sexual, que puede no ser muy bien vista en su sociedad, como le ocurrió a García Lorca, en un tiempo en que la homosexualidad estaba perseguida, o a Michel Jackson con su excesivo encariñamiento con los niños que le costó más de un escándalo.

En las mujeres también se puede notar por  un erotismo oculto que sólo despliegan en secreto, muy similar a las mujeres de Escorpio. Un ejemplo podría ser el de Susan Hayward.

Pero también puede fluir a través de una actividad intelectual excepcional como ocurre con Marguerite Yourcenar o un dominio de su cuerpo extraordinario como la bailarina Isadora Duncan- La influencia de Plutón nunca pasa desapercibida.