Vivimos en un mundo organizado por exigencias de horarios y por los tiempos señalados en el calendario que ordenan nuestra vida de un modo casi imperceptible pero brutal. Toda nuestra vida está sujeta a estas determinaciones de tiempo cíclico anual y fijo que condicionan nuestra existencia; días laborables; lunes, martes, miércoles, jueves viernes, sábado y días festivos. Navidad, Todos los Santos……………….horas de trabajo y horas de ocio, horario de comidas y de descanso, etc. Todos estamos sujetos al reloj y al calenario. Por ahí nos tiene agarrados el demonio, con perdón.
En su aspecto positivo, esta red de horarios nos permiten ordenar nuestras costumbres y predecir lo que podemos hacer en un futuro medio; citas con los demás, vacaciones, festividades importantes, viajes futuros etc.
Ahora bien, paralelamente a estas ataduras temporales, existen otras leyes temporales que actúan a modo de medidas de tiempo y que también influyen directamente sobre nuestra existencia. Son medidas de tiempo menos conocidas pero igualmente determinantes. Conocer estos ciclos evolutivos, puede ayudar a reorganizar nuestras vidas y liberarse un poco de las otras ataduras
Los ciclos terrestres sujetos a horarios y a calendario nos atan, nos contraen y nos privan de libertad personal; mientras que los ciclos celestes nos expanden, nos liberan y nos permiten desarrollar adecuadamente nuestra creatividad, eso ciclos celestes son lo que conocemos como la influencia de la Astrología.
Definir que es la Astrología es muy complejo porque abarca un gran abanico de tendencias, funciones y cometidos. -Y seguro que la señora que se cansa de leer ya estará en Youtube.
La Astrología se puede entender como la más antigua técnica para el conocimiento de sí mismo y para la comprensión de los demás.
La Astrología se puede definir como un lenguaje para la mejor comprensión del mundo y del ser humano: Modelos, arquetipos, etc. Signos zodiacales, tipos planetarios, ciclos planetarios etc.
También se puede concretar como un sistema de conocimiento que sirve de ayuda en la realización personal. Igualmente puede definirse como un sistema psicológico, relacionado con los movimientos celestes, que permite conocer mejor los estados del alma o del psiquismo humano. Lo que se conoce como Psicoastrología.
La Astrología asimismo puede definirse como un Arte. En la antigüedad tenía incluso su musa particular, y existe toda una historia del arte astrológico en el que se incluye la arquitectura.
De igual forma la Astrología puede definirse como una vía de conocimiento esotérica que conecta con la magia ceremonial, la Cábala y otras vías secretas de conocimiento.
De manera más racionalista, se puede definir como ciencia social predictiva, haciendo uso de lo que conocemos como astromundial.
También entra en el campo de la meteorología, o es útil para elegir los momentos adecuados, tanto en el mundo agrícola como en el de las actividades y relaciones humanas, – la Astrología eleccional – y por último, sin pretender por ello limitar las definiciones, como puente entre otras terapias y una ayuda para el diagnóstico médico..
Cualquiera de estas definiciones es válida para especificar la Astrología, pues cada una de ellas forma parte de una misma cosa; la relación entre los movimientos de los cuerpos celestes y la vida humana.
Pero la idea que más me gusta es la que me hace sentir que allá arriba en el cielo, hay un Ser inteligente que forma parte de nosotros, un guionista director magnánimo, misericordioso y tolerante que nos permite escenificar el guión que Él nos ha dejado escrito en el cielo, del modo que mejor podamos, cada uno a su manera, eso si, en su tiempo
No me provoca placer decir que la Astrologia son “paquetes integrados de información en radiofrecuencia cuántica diferencíal“, es como reducir el amor a incrementos hormonales.