Y sí, definitivamente la influencia de la estrella Sheratan se deja notar de manera total, para bien y para mal. La actriz María Eschneider es un buen ejemplo de esta doble influencia de la estrella.  Por un lado la elevó a lo más alto del mundo del cine, en la película “El último tango en Paris” en compañía del gran actor Marlon Brando, y al mismo tiempo, padeció la humillación de sentirse violada en la escena del coito anal y la mantequilla.

Con apenas 19 años y sin gran experiencia en la pantalla grande, María Schneider cobró fama mundial en 1972 al compartir el protagonismo con Marlon Brando, una leyenda de difícil comparación por su talento actoral. Sin embargo, su meteórico ascenso, marcado por una escena en la que sufría una violación, la sumergió en adicciones y llegó a intentar suicidarse en los años posteriores.

Murió relativamente joven tras padecer una larga enfermedad de cáncer que se propagó por todos sus pulmones, dejándose notar una vez más la fatal influencia de la estrella Sheratan.

El día de su muerte, el atacir del Ascendente, en el ciclo de 13 años, el reloj de la muerte, llegaba al mismo grado de la Luna con la estrella Sheratan.

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