Estaba con la caja abierta, toqueteando los relojes mágicos, como hace un niño con sus juguetes, y se me ha ido la mirada al reloj de color rojo y negro que me atrae mucho, quizás porque por son mis colores. Marte y Saturno, rojo y negro. Ese es el reloj que lleva grabado en la tapa roja el dibujo de un cangrejo. Al abrirlo te das cuenta que está dibujada, en modo reloj, la carta del cielo de la conjunción de Marte y Saturno en el signo de Cáncer del año 2004, que tiene una carga de tiempo de 30 años, lo que significa que su influencia llega hasta el año 2034.

Me digo, déjame que lo abra y que lo ponga en hora para un lugar donde vayan a sonar muchas “astrodinas” en este año 2022.

Calculo, recálculo, reviso lo calculado y checo, como dicen los mexicanos, el recálculo, conecto el automático, al final lo dejo al azar y se abre la alfombra, súbanse quien quiera y nos dejamos llevar. -A ver dónde hemos ido a parar.

Abro el reloj de bitacora, en modo atacires del 30 y sale………..

¡Atención, atención!  Sobrevolamos Bogotá, tiempo húmedo, nubosidad abundante, como siempre, aquí en esta época del año, no entra el sol, no vamos a ver ni un pimiento ni nos vamos a enterar de nada si no bajamos a preguntar.

El reloj de bitácora de la alfombra señala 40 astrodinas locales y 20 universales; el atacir de la conjunción de Marte y Saturno está pasando por el Ascendente, al mismo tiempo que el atacir del Mediocielo ha llegado al lugar de la conjunción de Marte y Saturno en la Casa V, el escenario de los Congresos o los Parlamentos, y eso suman 40 astrodinas locales, y si le añadimos las 20 astrodinas universales del atacir de Mercurio y el Nodo Norte de la Luna que está pasando sobre Plutón, en la Casa X, donde sale a escena el que «manda» en el país. Mercurio y el Nodo son como una puerta abierta para que el gobernante dicte su mensaje y sus ideas sobre la Colombia que quiere gobernar.

¿Quién será? -Qui Lo sa.

-De momento ya tenemos las 60 astrodinas. Campanadas de arrebato, cambios sonados de tiempos.

-Por lo que se nota, todo está cambiando vertiginosamente en Bogotá, ya las cosas no son como eran a principio del año cuando gobernaba Iván Duque. El Congreso de la República ya no es el mismo, han cambiado de caras, hasta las de los bedeles, esta es otra gente la que hay por aquí.  Mucho tumulto, mucho ruido en el Congreso. Se están legislando nuevas leyes, chirrían los dientes de algunos diputados, hay mucha tensión está pasando la apisonadora por el Congreso.

Un nuevo gobierno dirige este país, un gobierno que tiene el comportamiento de una apisonadora,  se nota algo así como si detrás del nuevo gobierno hubiera un gobernante “apisonadora”.

Y se me ha vendido a la cabeza Petro, porqué la Betancourt o el Zuluaga y los demás, no que creo que puedan derrotarlo en la segunda vuelta ni hacer de apisonadora.  -Y como las derechas latinoamericanas son como son, que no se ponen de acuerdo ni para el menú de la cena, les puede pasar como les ha ocurrido a los peruanos y a los chilenos.  Eso es lo que parece que ha ocurrido aquí.

¿Petro gobernando?  -No me lo puedo creer. Eso habrá que estudiarlo despacito. Lo miraremos juntos.

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