Cada 12 años, el Sol forma conjunción con el planeta Júpiter en un mismo signo zodiacal, y el reloj del ciclo que se forma nunca es igual, porque siempre ocurre en días diferentes, horas distintas y el cielo de ese día es diferente para cada lugar de mundo. Nunca el cielo de la conjunción del Sol y Júpiter, que da vida al nuevo ciclo, es igual, aunque tenga una naturaleza semejante.

El ciclo del Sol y Júpiter en Aries, siempre tiene un significado de prosperidad y bonanza económica a través del trabajo, del esfuerzo o de las guerras.

Imagínate la cantidad de dinero que van a ganar las empresas que se dediquen a fabricar material bélico; municiones, cañones, tanques, aviones, drones artillados, uniformes militares y todo lo que se te ocurra a ti que sea útil para hacer la guerra. Los mejores negocios del ciclo lo van a hacer las empresas armamentísticas. No importa que te guste o no, eso es lo que se ve a causa del nuevo ciclo en Aries en modo general, mundial.

-No toda la influencia de prosperidad y la bonanza económica del ciclo se relaciona con los asuntos bélicos. De Aries viene arar, labrar, laborar, trabajar y esforzarse, esa es la naturaleza del ciclo de Aries.  Hay países que son muy trabajadores, como por ejemplo México, cuya naturaleza ancestral es Escorpio, al margen de la influencia de Virgo, que también la  tienen, ambos signos Escorpio y Virgo son muy trabajadores.

No es lo mismo países con componentes Libra como es Venezuela o Argentina, ambos países regidos por Venus, donde hay muy buenos “artistas”, pero eso de trabajar no lo llevan con la misma soltura que en México.

No sé si sabes lo del mito que cuentan que estaba la diosa Afrodita tejiéndose una braguitas, cansada ya de ir desnuda con el “potorro” al aire, cuando la vio tejer la diosa de los ojos grandes, la hija de Zeus piter, que era la diosa de las tejedoras. Atenea se enfureció como  se enfurecen las mujeres de Acuario, y le montó un pollo de mucho cuidado. Fue en busca de su padre, y a Zeus piter no lo quedó más remedio que prohibirle a Venus que trabaje.  –Le dijo  Zeus a Afrodita. -Afrodita tu función en el Olimpo es agradar a todos, hacer cosas que provoquen gracia o despierten el amor, nada de trabajar, eso no es cosa tuya, así que te prohíbo que trabajes. Si quieres trabajo búscate un marido trabajador. – Y así quedo la cosa. Por eso las mujeres “poseídas” por Venus no pegan un palo al agua y van ellas todas arregladas con las uñas largas pintadas, buscando siempre alguien que las financie, igual que los artistas que necesitan un mecenas para dedicarse a su arte.   Y eso no es bueno ni malo, eso es así.

En Venezuela o Argentina hay mucho arte y mucha belleza. –Lo de trabajar de sol a sol, como hacían los antiguos catalanes, no es lo suyo.

El ciclo del Sol y Júpiter en Aries calculado para Buenos Aires, está en la Casa VI, el escenario del mundo laboral, y eso significa que el ciclo de prosperidad y bonanza económica viene de mano de los “labradores”, los que aran la tierra y siembran para luego recoger, de mano de los trabajadores.

Lo malo, de este ciclo bueno que trae progreso, prosperidad y mejoras económicas, es lo que refleja el planeta Neptuno que está muy fuerte en Piscis y se coloca en la cúspide de la Casa VI, obturando o alterando la libre circulación del trabajo y los trabajadores.  Neptuno siempre deja notar su influencia a través de grupos de cualquier clase. En esta ocasión, por encontrarse en la puerta de la Casa VI, el mundo laboral, se trata de los sindicalistas, los grupos de personas que afecta directamente al trabajo.

Neptuno forma una cuadratura “separativa” con la Luna, lo que significa que las contrariedades que causan estos grupos mafiosos en la población, irán disminuyendo, que el número de “sindicatos”, que en la actualidad superan los 3.000, seis veces más que en España, que tiene más o menos la misma población. En España se cuentan más de 24.000 liberados sindicales y Argentina son tantos que no hay forma de saber su número, se estima que superan de largo los 100.000 liberados sindicales. Todos ellos en su conjunto son como una enfermedad que lastra el progreso y la prosperidad laboral en Argentina.

Además, Neptuno que representa a las “mafias” sindicalistas, forma una semicuadratura con Mercurio en Tauro, que es el “planeta angular” y por ello máximo protagonista del ciclo. Mercurio representa a los empresarios jóvenes, a los nuevos emprendedores, los que nacieron después de años 2000 y que se tienen que incorporar al mundo laboral a lo largo de los próximos 12 años. Son la generación de los “centenials”, mucho más pragmáticos que los millenials que no han tenido fuerza para sacarse de encima a la plaga sindicalista. 

Esta nueva generación de jóvenes emprendedores será la locomotora del país en el nuevo tiempo de prosperidad que está por llegar. Una generación poco ideologizable, por no decir nada, que lo que quieren es comer asado los fines de semana, y los choripanes que se los coman otros, y ser económicamente libres para poder viajar y tener sus viviendas

La semicuadratura entre Neptuno y Mercurio refleja un conflicto, un intento de extorsionar a los nuevos emprendedores, parecido a lo de las maras salvadoreñas que ya están entrando por miles en la cárceles. Quizás esa sería la solución en el nuevo ciclo para con la mafia de los sindicatos argentinos, demasiados extorsionadores sueltos, son uno de los peores y más graves problema del país.

Gracias al Guionista todo se mueve, y ahora están las cosas como están pero pronto cambiarán-

He calculado el ciclo y lo he puesto en hora con los atacires que se mueven un grado cada 12 días, para final de año, cuando entre el nuevo gobierno que salga de las elecciones de octubre.

Llegado el mes de noviembre de 2023, justo después de las elecciones presidenciales, contando solo con el atacir de la conjunción del Sol y Júpiter, se cuentan 40 astrodinas, y eso es algo no puede ocurrir en otro país  – En Montevideo que suele ser parecido a Buenos Aires, el planeta Mercurio queda en zona de reposo de la Casa VI, por debajo del horizonte. Mientras que en Buenos Aires está por encima del horizonte y tiene mucha más fuerza y protagonismo.

Cuarenta astrodinas en este ciclo significa que a partir de final de año ya nunca más serán las cosas como eran antes en Argentina, especialmente en tema del trabajo y la prosperidad económica que el trabajo origina de modo natural y que trae consigo mejoras económicas.

Todo ello da para pensar en un cambio de gobernantes y la defenestración de todos los políticos ineptos que ha sido incapaces de sacar, a uno de los países más ricos del mundo, de la miseria estructural, que es una miseria artificial y no se corresponde con lo que puede ser y será Argentina en el futuro.

Y a la señora que se cansa de leer, hoy no la he nombrado. –Total para qué.