La virtud maravillosa de la influencia de las estrellas es que si tienen de donde agarrar a una persona, la eleva y la pone más alta de la nunca nadie hubiera podido imaginar. Cuando una estrella como la 29 arietis se alinea con la Luna natal de una persona, tiene garantizada la elevación y la popularidad exagerada. Es como si colcaran a la persona en un pedestal de mármol blanco en una posición muy elevada para que todo el mundo la vea. Con esta estrella sobre la Luna es muy difícil pasar desapercibido siempre ocurre algo que hace a la persona más elevada, más popular de lo que quizás hubiera deseado.
La influencia de la estrella es semejante a la de una madriguera de conejos, que sabes que hay conejos pero no sabes por dónde, ni cuándo va salir el conejo. Lo único que tienen en común las personas que tienen la estrella 29 arietis sobre la Luna, es que algún momento de sus vidas experimentan una exagerada elevación, una popularidad desmesurada, de la más variada gama de asuntos.
Una de las personas que tenía a la estrella arietis 29 a menos de un grado de la Luna era el Almirante Carrero Blanco.
En la carta de cielo de nacimiento del Almirante Carrero Blanco se observa que la Luna está a menos de un grado de la estrella arietis 29. También tiene a la terrorífica estrella Antares en la cúspide de su Casa VIII, por eso su muerte fue tan espectacular y “elevada”.
Los terroristas de la ETA le metieron una bomba enorme, la más grande que nunca han explotado esa banda, por eso se sospecha que tuvieron ayuda militar de un país extranjero. Fue tan grande el “bombazo” y la “elevación”, que el vehículo en el que viajaba el Almirante, un Dogge negro blindado que pesaba como seis elefantes de circo, se elevó por encima del tejado de un tercer piso, emulando los cohetes de Elon Musk. Se elevó, es lo que importa, la estrella lo elevó y lo puso más alto de lo imaginable para matarlo.
Y es que en el caso del Almirante, se “conchabaron” la estrella arietis 29, con la terrible estrella Aldebarán y por eso su muerte fue tan espectacular.
Oiga mi Lord y ¿cómo puede demostrar esa afirmación peregrina que se “conchabaron” las dos estrellas.?
-Nada es más fácil de demostrar. Veamos, esto son relojes, y no los mires de otra manera. Los relojes sirven para dar la hora. ¿Qué te parece si pongo en hora los atacires de las muertes asistidas para el día de su “ascensión”?
El ciclo de 45 años es el reloj de las muertes por accidente, por suicidio y también por asesinato. Al Almirante lo asesinaron de manera espectacular, ahí es donde se nota la influencia de las estrellas.
El día 20 de diciembre de 1973 el atacir de la estrella 29 arietis que viaja junto a la Luna, llegaba al lugar de la estrella Antares, en la cúspide de la Casa VIII. La puerta del camposanto se abrió con estruendo y elevación desmesurada. Un ejemplo exagerado pero perfecto…………..y si que se “conchaban” la estrellas.