Una pena es que se me acaban las mini vacaciones playeras. Otra pena es la defenestración de Luis Rubiales y la que se les viene encima a los directivos que lo aplaudieron. -El feminismo al completo capitaneado por Yolanda Díaz, Irene montero, el ministro marinero de deporte, y una “manada” de señoras dispuestas a machacarlos y hacerse con el poder, van a intentar “cambiar” el modelo del mundo del deporte. Otra pena más por la guerra se les viene encima-
-A mí nunca me ha gustado el fútbol, no me siento involucrado, solo observo.
Mucha más pena me dan los inmigrantes subsaharianos que siguen muriendo en el mar. Y para acabar de apenarme, me da mucha pena Donald Trump.
Tranquilos que nadie huya, seré breve.
El día 4 de marzo de 2024 será el juicio contra Trump. Digo bueno, bien, vale, voy a calcular los atacires básicos, es decir, las direcciones primarias primitivas, en la carta de Donald Trump para el mes de marzo de 2024, a ver qué se ve.
He eliminado todos los elementos que no son fundamentales en este tiempo. Y lo que resulta más interesante es el atacir del Medio Cielo sobre Plutón en la Casa XII.
Vayamos por partes. -El Medio Cielo se comporta igual que un escaparate ambulante que por donde pasa va haciendo público y notorio, mostrando todo lo que va tocando.
Plutón es un planeta que cuando entra en escena, si no duele mucho, mucho, mucho, no es Plutón.
Y la Casa XII es el escenario de todo tipo de castigos, penas y penados. Es por eso que digo que me da pena Trump porque lo veo penado, apenado, castigado, y eso será algo público, que podría ser semejante a lo de Luis Rubiales.
Pero cuidadín que Plutón, aunque duela mucho, mucho, mucho, si no te he matado del todo, tiene el guion del ave fénix que renace de sus cenizas. Ahora bien, doler, doler, duele y mucho, y dar pena, la da.