Una de las cosas más importantes para que eran útiles los calendarios de los mayas es que distinguían diferentes tipo de lluvia, distintas maneras de llover, pues en una zona como es la Península del  Yucatan, las lluvias tienen muchas maneras de ser; lluvias buenas para tierra y adecuadas para sembrar, lluvias matutinas suaves, lluvias vespertinas intensas y de corta duración, lluvias tormentosas o torrenciales, lluvias nocturnas torrenciales, lluvias acompañadas de vientos huracanados y toda una variedad de lluvias propias de esa región del mundo.

En esta estampa de la lámina 66 se observa claramente la representación de grandes lluvias torrenciales. En la parte superior están los glifos que indican eclipses, y en la parte inferior de la izquierda se observa un glifo doble que representa a las lluvias torrenciales nocturnas.

El primer glifo de la parte inferior de la izquierda es un glifo doble compuesto que significa lluvias, el primer glifo de la izquierda es el simbolo del Sol y el de la derecha es el glifo de Akbal la noche; Sol y noche sólo pueden ser dos cosas, algo que ocurre por la noche o durante un eclipse de Sol combinado con Venus, que finalmente es el protagonista de la estampa. Creo que es un eclipse porque es algo que ocurre sólo en un día, por eso la estampa lleva un solo punto de color rojo en la parte superior del glifo del eclipse, que significa un día de lluvias nocturnas y torrenciales.

A lo largo de las diferentes estampas del códice se observan los glifos que señalan todo tipo de lluvias.

Son muy numerosas las estampas del códice que señalan los tiempo de lluvias, de diferentes tipos de lluvia. En la estampa de la derecha, sobre la imagen a la que caen amplios chorros de agua, está la banda celeste y en la parte superior los glifos; el de la derecha es el glifo de la constelación de Coz o el Zopilote, representado por la imagen del ave de la estampa y el de la izquierda enmarcado uno de los glifos significador de lluvias, en esta estampa de la derecha es un glifo compuesto donde destaca el glifo de Imix, la deidad del dragón de la tierra fértil. En la parte inferior del glifo de Imix se observan unos trazos significadores de la aguas.  Este glifo es señalador de aguas para las tierras fértiles. Mientras que en la parte superior de los glifos se destacan dos dibujos que representan sendos esclipses..

 Estampa donde la imagen central es Venus, al que también conocen como Chac o deidad de la lluvia-el glifo que la identifica está en la parte superior del derecha de la estampa, aunque sólo se distingue la mitad inferior del glifo- en esta estampa, que es de clara referencia a la lluvia, aparece de nuevo el glifo del Sol y la Noche con los trazos inferiores significadores de aguas.

Los astrólogos Maya concedían una gran importancia a los eclipses relacionándolos con las lluvias, algo que lo demuestra los numerosos dibujos que los representan y que están muy presentes en todas las estampas donde se señalan o se pronostican lluvias importantes. A la izquierda del glifo de las lluvias, está el glifo de las tres marias y parte de Orión, para señalar que cuando Venus atraviesa esa parte del cielo llegan las lluvias.

Venus y la Luna son los elementos fundamentales en las estampas donde se anuncian lluvias.

Estampa protagonizada por la Luna que lleva en la mano una cántara que vierte y deja caer el agua, en clara referencia a la influencia lunar en las lluvias. El glifo del Sol y Noche también está en la estampa para señalar las lluvias torenciales nocturnas.

 Lo importante de lo que desprende de estas estampas, es que los Mayas sabían cuando iba a llover y de qué tipo de lluvia se trataba y para ello se basaba en eclipses combinados con otras configuraciones astrológicas en las que intervienen los demás planetas, de manera semejante a la antigua Astrologia mesopotámica.

Además de las lluvias tambien anunciaban la llegada de los calores sofocantes, para ello dibujaban la imagen de Venus con una antorcha en la mano dirigida hacia abajo.

Los Mayas eran maestros en climatología y meteorología, y fueron capaces de diseñar un calendario meteorológico y climatológico que llega hasta nuestros dias.

En la parte final del códice, cuando se está llegando al final de los tiempos, se ocupan preferentemente de advertirnos del cambio climático que estamos viviendo y de las grandes inundaciones relacionadas con los eclipses y las influencias celestes.

La última estampa del Códide de Dresde, contiene un paquete de tiempo que abarca desde el año 2012 hasta el 2023, donde se observa una alarmante caída de agua celestes, que señala claramente un tiempo de grandes inundaciones y que se corresponde con el eclipse del año 2023.

¿Sabían los mayas calcular los eclipses?

Si, seguro que si, tal y como he mostrado en trabajos anteriores. Sabían calcular eclipses de Sol y de Luna, y también caculaban los eclipses de Mercurio y Venus con el Sol, antes que los europeos, más de1000 años antes. Y estos cálculos les servian para conocer de antemano los cambios meteorológicos de todo tipo.

El eclipse del 14 de ocubre de 2023, es reflejo de la imagen de la última estampa- Un eclipse sensacional, descomunal, extraordinario y único, que dejará en la más absoluta oscuridad a la parte del mundo que fuera en su tiempo el imperio Maya; desde Honduras, Guatemala hasta México, y que no se salva buena parte de los EEUU donde ya están padeciendo los preámbulos de lo que se ve venir.

Para eso usaban la astrologia los mayas, igual que los egipcios para preveer las inundaciones del Nilo o los mesopotamios las crecidas del Eufrates y el Tigris.

¡¡¡¡¡Agua viene!!!!!! ¡¡¡Agua va!!!!

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